domingo, 27 de diciembre de 2009

If you don’t love me…lie to me…

En una mañana de estos días señalados en el que te levantas con una extraña sensación, parecida a una resaca después de una noche de fiesta con algunos amigos, recuerdas el partido de baloncesto que viste la madrugada anterior. Te viene a la mente algunas acciones del partido en el que un equipo capaz de hacer un gran juego y con algunos de los mejores jugadores que este deporte nos ha brindado, demuestra una enorme falta de compromiso y respeto a todos sus aficionados haciendo que el partido sea puramente algo que ver mientras te entra el sueño.
Lo curioso del caso es que no muy lejos, en nuestras canchas, pasa algo parecido por no decir igual… Cuando sabes que un equipo es capaz de hacer un baloncesto fácil y atractivo (dentro de unas limitaciones) y les has visto hacer entrenamientos que realmente valen tu sacrificio y aun así, -sin saber como, porque motivo o de que depende- en algunas ocasiones, curiosamente repetidas ocasiones, su actitud es parecida a los jugadores de aquella madrugada del día de Navidad.
Son actitudes que hacen que sientas las ganas de inyectarles una dosis de tu sangre en la que la pasión y el carácter hacen que desborde por tus venas. Pero la realidad es cruda y puedes intentar que el grupo retome la senda que no hace muchos días atrás seguía y te hacían disfrutar como un niño la noche de reyes. Como muchas cosas en la vida, es algo imposible de controlar y dominar pero aún así, como aquel amor imposible que todo el mundo tiene alguna vez, no dejas de luchar por ello sin dejar de ser optimista y esperar pronto una respuesta de la otra parte, aunque sea una mentira, un engaño.

martes, 22 de diciembre de 2009

Ganar sin motivo

¿Ganar un KO o aprender a Tirar?
¿Meter un tiro libre, o fallar 10 para meter los 100 siguientes?

¿Aprender a hacer una entrada por la izquierda y fallarla o meterla con la derecha y no saber usar la izquierda?
¿Aguantar
defensivamente con buen desplazamiento lateral o meter una mano y comprometer a mis compañeros?
¿Ganar un partido por talento o perderlo con sacrificio?
¿Ganarlo con buen
porcentaje o perderlo con compromiso?
¿Entrenar para aprender o entrenar para ganar este
sábado?
¿GANAR CON LO QUE TENGO O APRENDER A GANAR?

"Todo se resume en una máxima muy sencilla: existen buenas y malas m
aneras de hacer las cosas. Usted puede practicar el tiro ocho horas diarias, pero si la técnica es errónea, sólo se convertirá en un individuo que es bueno para tirar mal. " Michael Jordan


viernes, 13 de noviembre de 2009

Miedo a disfrutar


Alguien dijo alguna vez: “El deporte es lo primero que uno elige, es la primera elección importante de nuestras vidas”.

Esta frase hace referencia a que en toda infancia de un niño/a se le brinda la oportunidad de hacer uno o varios deportes, y es el muchacho/a que debe decidir cual practicar. Lo curioso es del caso es que con 6 o 7 años sus mentes no están lo suficientemente influenciadas como para repercutir en su decisión y no tienen demasiado conocimiento del deporte que practican y, aunque parezca contradictorio, la mayoría de respuestas a la pregunta, ¿por qué juegas a baloncesto? son: “porque mes gusta”, “porque mi amigo/a también juega” o “porque me lo paso bien jugando cuando juego en el recreo”.

Poniendo especial atención a la última frase, porque lo pasa bien cuando juega en el recreo. El chaval disfruta sin tener idea de cómo lanzar el balón correctamente para que entre en el aro, no sabe que hacer una vez ha pasado el balón, no ha adquirido ningún tipo de conocimientos de técnica individual, no sabe ningún sistema se juego y aún y así el disfruta y se siente como pez en el agua.

Con los años el niño/a irá adquiriendo los conocimientos que le mancaban de un principio. Pasarán partidos, unos de buenos y otros peores, unos triunfando y otros derrumbado; pasarán compañeros de equipo, con los que se llevarán mejor o peor; pasarán entrenadores, con los que estará más de acuerdo o menos. Pero no que puede pasar es la mentalidad del niño/a que jugaba en el recreo de aquel colegio con sus amigos porque se lo pasaba bien. Deberá seguir disfrutando de este deporte, aprovechar todo lo que pueda y jugar cada partido con la emoción con el que jugo su primer partido, sin darse cuenta, con sus colegas en el patio de la escuela ya que nunca sabrá cuando le puede llegar el fin.

jueves, 22 de octubre de 2009

ALGO MÁS

Llevo unos días pensando la manera que podáis individualmente superaros a vosotros mismos como persona, la manera de educaros como componentes de un grupo y sobre todo disfrutar de este deporte.

Está muy bien ganar cualquier partido, y mas despuès de 2 derrotas,ver que el trabajo hecho no es inútil, está muy bien recibir menos de 45 puntos en 2 partidos, también es admirable la predisposición, el esfuerzo en llegar puntuales a los entrenamientos saliendo muy justos de las clases y con muchas ganas de entrenar. El esfuerzo de más de un jugador que a sabiendas de sus carencias intenta corregir sus errores.

El pasado sábado hicisteis un buen partido, defendiendo intensos y haciendo las cosas que hemos trabajado en los entrenamientos, en este sentido creo que podéis estar orgullosos, poo a poco vamos logrando objetivos muy pequeños que al final nos deben hacer buenos jugadores, y saber que se esta jugando A BALONCESTO.

Cuando hablamos de buen jugador de baloncesto nos referimos que es un jugador correcto en los sentidos técnicos y que sabe cual es su luga en todo momento ( lo traemos trabajando 3 semanas y creo que sábado lo demostramos) y es trabajo de los entrenadores que asumís este nivel.

Os envío este mail para pediros, mas que pediros os invito a que seáis algo mas que esto, que nos ayudáis a los entrenadores a que llegáis a este nivel a base de concentración e intensidad a los entrenamientos, pero por encima de esto hay otras cosas. Para mí es un orgullo ver cuando tu equipo hace piña entre ellos, ver que aun cuando PIERDAN O GANEN se animan entre ellos, que al final del partido hacen el grito por la suya cuenta y desde el banquillo no se para de animar a los que están a pista, dándole energías y ánimos para que en cada jugada intenten dar algo más de sus limitaciones u superarse personalmente.

Os invito a que seáis más que un buen jugador de baloncesto, que seáis UN GRAN EQUIPO, y que seáis muy buenos compañeros. Que cada partido sean 2 horas de pasarlo bien, de animar a los compañeros y no exigirle nada a ellos, que cada cual se exija a él mismo el máximo que puede ofrecer a los compañeros.

Individualmente, cuando adquirís los conocimientos técnicos y sepáis que debéis hacer en cada momento seréis buenos jugadores, pero al asimilar esto y además estéis seguros que durante los 40 minutos, animáis, apoyáis y intentáis hacer felices a los compañeros, seréis JUGADORES IMPRESCINDIBLES.

Ánimos!

sábado, 17 de octubre de 2009

¡Espectacular!





Porque me acompañaste en mil noches de baloncesto,
porque hiciste que aquellas tardes de mes de agosto fueran más frescas de lo normal,
porque todos los jugadores eran algo mas que jugadores gracias a tus motes.
porque tu duo con Daimiel era imparable,
¡Porque eras muy bueno Andrés!

jueves, 8 de octubre de 2009

FORMAR FALSOS AMANTES

Todos quieren llegar a ser los mejores, ser el máximo anotador del equipo, de la jornada, y al final de la liga. Quieren ganarlo todo siendo el mejor, cuando entrenas un grupo de chavales piensas que ojala sea así, que estos chicos lleguen lo mas alto posible y la ambición que ponen es la adecuada, normalmente no se dan cuenta de dónde están, de el porque practican el baloncesto, porque sus padres querían que su hijo hiciera algún deporte, porque su mejor amigo se ha apuntado a botar un balón naranja y ellos no saben que hacer, en este punto de maduración de los chicos siempre hacen algo porque aquel o este también lo hace y en pocas ocasiones el chico ama este deporte antes de empezar.
A partir de aquí es cuando aparece el papel del entrenador, debemos darle la base para que disfruten de esto, para que jueguen a divertirse y sobretodo para que entrenen para pasárselo bien, durante una temporada juegan unos 40 partidos pero entrenan el triple de veces. Transmitir tu ilusión a los chicos no es tarea fácil, se debe encontrar el punto entre las ganas de aprender y el saber competir, muchos caen en el error de querer competir en edades de formación, enseñan sus variantes defensivas preferidas, sus 10 sistemas que usan con su equipo senior por tal de conseguir esos resultados que le llenen a él y a sus chicos por haber ganado un partido. No es novedad escuchar “Que bueno es este entrenador porque mi hijo de 7 años ha ganado la liga”

Cuando te obsesionas en competir, acostumbras a encontrarte otros equipos que juegan para divertirse , la dinámica de los entrenamientos es positiva, con exigencia pero sin la presión de ganar y ganar, al producirse este encuentro lo mas probable es que pierdan los que aman ganar, la presión de tener que hacerlo todo bien a estas edades es demasiado grande, la cantidad de fallos de errores deportivos en perdidas de balón, en no saber como jugar, de moverse jugar en equipo, no saben los motivos de sus pasos de aquel reverso, todo esto se produce en tal cantidad de ocasiones que se nos hace imposible pedirle a estos chicos que siempre deben ganar porque en los entrenamientos colocan a sus jugadores de tal manera que le permite 60 puntos por partido.


No nos debe importar perder partidos, perder ligas, por no haber competido, nos centraremos en que nuestros chavales lleguen a final de temporada mejores técnicamente, con buenos conceptos adquiridos, que los chicos deseen volver a entrenar por que les gusta el baloncesto. Conseguir transmitir todo esto no es nada fácil y menos si pierdes todos los partidos, aquí es donde diferencio lo que es para mi un buen entrenador, saber mantener la relación competición-aprendizaje de los chicos, habiendo quedado últimos en liga llega el Septiembre y entrenas a 2 o 3 equipos con 15 chicos en el equipo, y nosotros hemos ganado en Septiembre y no en Junio.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Un día en familia


Son las 7:30 de la mañana y el ruido irritante del despertador te marca el inicio de un nuevo día. Sin embargo, hoy no es un día cualquiera. Te espera un día repleto de baloncesto, mientras preparas tu maleta y comes algo rápido para callar el apetito matinal piensas en como irán los partidos, si lo tienes todo preparado, si no has olvidado nada.
Pasas a recoger a tu ayudante antes de dirigirte al pabellón. Se le ve un poco dormido, pero no te preocupa porque sabes que no tardará en ser el de siempre.
Llegamos unos minutos antes de la hora que convocamos a las jugadoras. Ellas llegan puntuales e impacientes para jugar el primer partido, aunque sean veinte minutos. Reúnes a tus jugadoras, les das una corta charla de concentración y preparación para el partido antes de empezar el calentamiento. Ellas responden. A pocos minutos de empezar el encuentro otra explicación en la que aclaras como afrontaremos el partido, en ataque y en defensa. Mientras te escuchan puedes ver en sus ojos las ganas, el entusiasmo y la euforia retenida como un dóbermann atado a una correa. ¡Un grito y las sueltas! Salen a morder, con agresividad. Tu, en el banco, te tomas unos segundos porque estas sorprendido. Tu compañero te alarga la mano, le respondes y le miras a los ojos y te transmite una confianza y seguridad que te meten en seguida en el partido. Te sientes identificado con el equipo y muy conectado con tu ayudante, todo parece ir bien. Una vez finalizado el match felicitas a tus jugadoras y sacas algunas conclusiones, aún queda mucho para trabajar pero no vamos por mal camino.
Cambias de cancha y de punto de vista, te toca arbitrar algunos partidos (como en los viejos tiempos). El primero junto con el que fue un buen entrenador tuyo y mejor amigo, te felicita por la victoria anterior y te informa de que no eres conciente de lo que acabas de hacer, puede que tenga razón.
Hambriento y un poco cansado vas a darte una ducha, cuando acabas vistes el polo del club. Elegante. Después de una comida en solitario te sientes con fuerzas de nuevo para afrontar el partido de la tarde. Te diriges de nuevo al pabellón para ver algún partido y encuentras al primer entrenador del junior, del cual eres ayudante. Decidís salir del recinto para preparar el partido de la tarde. Sentados con una Coca-Cola cada uno revisáis las jugadas, el enfoque del partido y el cinco inicial, con el que coincidís al cien por cien.
Ya en el vestuario con las jugadoras se les explica que pedimos de ellas, revisamos las jugadas, como afrontaremos el partido y, sobretodo, les animamos. Durante el calentamiento se respira tensión, todo debe salir a la perfección. Las jugadoras están concentradas, con la cabeza en el parquet, se hace notar en los pocos lanzamientos fallados durante las ruedas de tiro. Reunimos a las jugadoras de nuevo y recordamos los conceptos de ataque y defensa y ¡a jugar! Al acabar el partido animas a las jugadoras, han hecho un buen trabajo y han obtenido su recompensa.
Minutos después sentado en la terraza del restaurante, con una horchata fría entre las manos, contrastas opiniones con varios entrenadores, te das cuenta que aún queda mucho para trabajar pero no vamos por mal camino.
De camino a casa y escuchando una pausada canción de Jack Johnson sonríes y es que...eres entrenador de este maldito deporte que tanto amas.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Sueños sin dormir


¿Dónde estarás dentro de diez años? ¿Cómo serás dentro de diez años? ¿Con quien estarás dentro de diez años? Son preguntas que uno se hace con frecuencia, se debe trabajar teniendo vista para el futuro, para tener una vida plena y honrada. Pero sobretodo debes trabajar para ganarte la vida, tener un bueno sueldo ¡vaya!

Pero, ¿ que hay de los sueños que tiene cada persona? Cada uno de nosotros tenemos metas distintas, queremos llegar a nuestro particular máximo. Es por esto que las preguntas deberían ser distintas…¿Dónde quieres estar dentro de diez años? ¿Cómo quieres ser dentro de diez años? ¿Con quien quieres estar dentro de diez años? Durante este tiempo la vida dará miles de vueltas y encontraras cientos de engaños, trabas y contratiempos. Pero si realmente deseas hacer de tu vida tu propia historia y escribirla des de donde quieras, como quieras y con quien quieras lucha, ten ambición para llegar a tu aspiración. No te dejes llevar, la gente habla y las voces te llegaran (ya sean buenas o malas), gente te apoyará y te tendrá siempre en lo más alto del trono de sus dioses. Otra gente te rechazará, te pisará en cuanto pueda hasta dejarte K.O. Pero lo gente que te quiere de verdad te animará, te ayudará, te defenderá, te instruirá para que crees tu propio camino y llegues a lo más alto, porque creen en ti y en tu sueño, en tus posibilidades.

Todo esto es muy bonito visto escrito y sentado en un sillón delante del ordenador así que si realmente quieres tomar las riendas de tu vida y conseguir ese sueño que tanto anhelas, ¡levántate, toma aire y sal allí a comerte el mundo!

martes, 4 de agosto de 2009

Reflexiones en la orilla del mar



Tumbado en la arena de la playa en un día triste y oscuro y después de saborear un ChikenPig, comprado en el restaurante de ambiente surfero situado a escasos metros del mar, me dispongo a leer un libro que días atrás compre y que en algún cumpleaños regalé a una buena amiga.

“Qui soc jo? I com, em demano, acabara aquesta història? El sol ha sortit, i jo sec al costat de la finestra que està entelada amb l’alè d’una vida que ha desaperagut…”

Con estas primeras líneas de la novela no puedo evitar desviar mis pensamientos hacia atrás, hacia la pasada temporada. El primer paso es pensar en la evolución de las jugadoras y jugadores de mis equipos, de como han progresado des del principio hasta el final. Posteriormente pienso en mi, en como he actuado durante el transcurso del año. Si las decisiones que tomé fueron las correctas o las erróneas, si me salté algún paso en el aprendizaje de mis jugadores, si mi actitud en situaciones críticas fue la acertada o me deje llevar por el mal momento, si encontré solución a los problemas que me podían desorientar de mi ruta o simplemente los aparté y seguí como si nunca hubieran ocurrido, si plantee bien los partidos o no les di la importancia que se merecían, si en algún momento falté al respeto a alguien de mi entorno (ya sean jugadores, entrenadores, árbitros o auxiliares de mesa) o los supe tratar como debía.

Hecho este pequeño paréntesis de reflexión continuo leyendo el libro que me ha hecho valorar lo que tengo y me he hecho darme cuenta que, al fin y al cabo, cuando eliges algo, directa o indirectamente, estás descartando otra opción.

“Aquest matí faig fila: amb dues camises, uns pantalons gruixuts, una bufanda cargolada al coll amb dues voltes…”

sábado, 1 de agosto de 2009

VERANO, ÉPOCA DE MOVIMIENTOS

El creer estar por encima es muestra de debilidad, decidir cambiar, dejar alguna cosa para tener otra que supuesta mente esta por encima sin merecerlo en el mayor de los casos. Es fácil dar como razón que estarás en un sitio mejor, que tendrás a una persona mejor, y dejarlo así, normalmente suele ser la excusa, la manera de llegar al éxito o al mayor pico de nuestra vida, pero suele pasar que al llegar arriba o a medio camino te sueles encontrar a ti mismo, ver que te equivocaste por juzgar lo demás, anteponer las cosas negativas a las positivas, que sin haber estado por encima antes creíste estarlo.
Las mejoras, los cambios positivos han de llegar por si solos, el trabajo, la constancia el hacer las cosas paso a paso, el NO creerte por encima lo harán más fácil. Cuando llegas a un lugar donde todo ya esta bien has de saber incorporarte ser humilde y ahora TU eres el nuevo, no los demás, cuando llegas porque te creías superior es cuando caes abajo, i decides dejarlo todo, el ver que has perdido credibilidad, que no te encuentras a ti mismo, y por supuesto se deja de confiar en ti. No exijas mas de lo que has de tener, e incluso NO exijas las cosas que crees que mereces, desde la más frágil humildad y el mas duro trabajo y constancia todo se pondrá en su lugar.

Cada vez es mas complicado encontrar un jugador que lleve 6,7 años en un mismo club, que amen donde están y sean fieles a sus principios, los que pasan mas desapercibidos y lucen mejor los galones del club, constancia y humildad.



jueves, 30 de julio de 2009

Empezemos.

Sales a la calle y ves, pero no te fijas en nada, excepto en algo que te identifique, en algo maravilloso, alguna cosa que te atraiga, un lugar donde te gustaría explorar, te acercas e intentas hacértelo tuyo, disfrutar con ello.

Una vez lo tienes para ti, quieres mejorarlo, deseas aprender de ello....

...Algo parecido nos ocurre a nosotros con el baloncesto